Extracto de la sátira, La mujer sola de Darío Fo


Ah, tiene un hijo, que suerte... pero que digo, estaré tonta, si yo también tengo un hijo..., mejor dicho, tengo dos. Es que con la emoción de charlar con usted se me había olvidado uno..., pero no me acompañan, de eso nada. La nena porque está creciendo, ya sabe, los amigos, las amigas..., en cambio, el niño está siempre conmigo, pero tampoco me hace compañía. Siempre está durmiendo. Hace caca, come y ronca... ¡como un viejo! Pero no me quejo, no señora, yo en mi casa estoy divinamente. Como una reina. No me falta nada, mi marido me lo compra todo. ¡Tengo todo! Tengo..., pues ni yo misma lo sé, fíjese..., tengo heladera...si, yo sé que todo el mundo la tiene, pero es que la mía hace hielo en cubitos, sabe...tengo lavadora de 24 programas, lava y seca. ¡Si viera usted como seca! A veces tengo que volver a mojar la ropa para poder planchar de seca que está, toda tiesa. Tengo olla express, batidora, picadora, licuadora, trituradora. Música en todas las habitaciones ¿qué más voy a querer? Después de todo, solo soy una mujer. 

   Ah, si, tenía una por horas, pero salió corriendo. Después vino otra, también huyó. Todas las asistentes salen corriendo de mi casa. ¿Cómo? No, que va, no es por mí. (Incomoda) Es por mi cuñado...si, es que las tocaba. Las tocaba a todas en semejante lugar..., es que está enfermo, sabe. ¿Morboso? Pues yo no sé si será morboso, yo lo que sé es que pretendía cada cosa de esas pobres chicas..., y ellas, claro, se negaban. ¿Usted qué haría si mientras limpia la casa le meten la mano por debajo de la falda? ¡Y con una mano! Uy, señora. ¡Si viera el pedazo de mano que tiene mi cuñado! Menos mal que solo tiene una, que sino...Si, un accidente... (Durante este dialogo, se ha sentado frente a la ventana y cose mientras charla con la vecina) Un accidente de coche, imagínese, tan joven, treinta años, se rompió entero. Está escayolado de arriba abajo: solo le han dejado un agujerito para respirar y comer, pero no habla, solo masculla, no se le entiende nada. Los ojos le quedaron bien, así que no se los escayolaron..., se los han dejado al aire, y también la mano tocona, que también está sana, y también tiene sano... (Se interrumpe, confusa) no sé cómo decirle..., es que aún no tenemos confianza, acabamos de conocernos como quien dice, y no quiero que piense mal de mí..., bueno, en fin...que se ha quedado sano...ahí. ¡Y como de sano, señora! ¡Demasiado! siempre tiene ganas de... ya me entiende...Si, eso si, el pobre se distrae mucho. Lee una barbaridad, se mantiene informado...lee revistas porno, si, tiene el cuarto abarrotado de revistas guarronas, ya sabe, de esas con muchachas desnudas, ¡en cada posturita!, yo creo que a esas pobres muchachas, después de hacerles las fotos, las escayolan igual que a mi cuñado... si parecen anuncios de carniceria, con esas piezas de carne ampliadas, a todo color...

Para leer la obra completa pulse aquí.

EPÍLOGO.-


EPÍLOGO.-

Hace años que estoy preparando este libro, con la intención de transmitir mis experiencias, pero sobre todo con esperanza de que puedan sacar provecho las personas que lo necesiten. Deben comprender lo difícil que ha sido para mi sacar a la luz publica todas esas miserias por las que pasé y las diferentes barbaridades que hice producto de esa gran depresión a la que me llevo el sentirme un drogadicto...Ha pasado el tiempo suficiente para que pueda escribir de todo esto sin que me afecte ni me preocupe el juicio que puedan hacer de mi, me conozco bien y se que soy una gran persona y no me preocupa lo que los demás piensen...Se que un drogadicto no suele tener medios para entrar en Internet a leer, pues cualquier dinero que cogen es para quitarse el mono para poder levantarse y buscarse la vida. Pero quizás les pueda servir a sus familiares si he sabido transmitir los puntos más importante donde se puedan apoyar para curarse.

El alcoholismo o la ludopatía no es muy diferente, yo tenia un socio que estaba enganchadisimo en las maquinas tragaperras y tenia monos tan graves como los tienen un drogadicto, cuando no tenia dinero para jugar lo vi en una ocasión en un bar sudando sin dejar de mirar a las maquinas y como no le di dinero para jugar, al poco tiempo estaba vomitando al lado de la barra. Con eso quiero dar a conocer a los que no lo sepan lo duro que es para el enfermo y también para las familias. Debo de insistir una vez más, que el drogadicto es un enfermo y como tal hay que tratarlo y respetarlo. No haces bien en criticarlo o mirarlo por encima del hombro.

En una ocasión aprendí sobre las criticas algo importante, las criticas tienen que ser constructivas, si vas a hacer una critica, hazla con respeto y con la intención de ayudar a la persona a la que se la haces, tienes que intentar transmitir que lo estas intentando ayudar, pues de otra forma la persona criticada solo puede sentirse mal y cerrarse a la persona que se la hace... 

Las fotos que he publicado son mías, la mayoría aparecen en un vídeo de mis obras insertado en el capitulo 21. excepto las perspectiva que están sacadas actualmente de google heart. 
Espero haber cumplido con el objetivo de hacer un libro ameno con esos recuerdos y anécdotas graciosas que he ido recordando y poniendo en mi bloc de notas durante estos años. Debido a la crudeza del tema de fondo, no quería que el conjunto fuera excesivamente dramático.

Deseo que mi esfuerzo haya merecido la pena y que lo disfruten...

El triunfo de la voluntad.-Capítulo 31


Capítulo 31.-

El triunfo de la voluntad.-

Hoy le hice a Pedro un contrato de trabajo, lleva tres meses conmigo y no me ha dado la menor razón para que dude de su actitud positiva, sigue con sus visitas al psicólogo y no ha dado nunca un positivo en doping. Hablamos cada día sobre la postura a adoptar cuando por algún motivo se le pase por la cabeza la nefasta idea de consumir de nuevo. Me gusta su actitud, le digo que recuerde de nuevo mis palabras...tu no naciste enganchado, una mala decisión te llevo a eso y ahora tienes que retroceder en el tiempo a esa época donde ni conocías la droga, para que entiendas que ese es el estado al que quieres llegar, estabas bien y así es como tienes que estar el resto de tu vida...

Ángel, por nada del mundo me acercaría de nuevo a la droga, siento por primera vez después de muchos años el deseo de vivir y hacer cosas positivas, como te dije, me lo debo antes que nada a mi mismo y después a mi familia que pasó tanto conmigo. ¿Y yo que, cabronazo?...se ríe con carcajadas estruendosas y se me acerca para darme un abrazo, esta vez lo abracé con mucho cariño.

Mi empresa constructora Reycon S.L., había tenido que cerrar por falta de encargos, yo me contraté como jefe de obras para hacer un bloque de pisos en la calle San José de San José de la Rinconada, un edificio muy bonito con patio central dividiendo dos alas...al lado de la peña sevillista.
A Pedro lo coloque en una empresa de un amigo mio también del sector de la construcción y cuando pasó el año y le dieron el alta definitiva, alquiló un piso y se independizó. Por un lado me alegré por el que por fin volara solo, por otro algo triste porque había sido mi compañero el ultimo año.
Este libro lo estoy escribiendo cuando han pasado ya veinte años de los últimos acontecimientos, sigo viendo a Pedro y está en perfecto estado. Ya en mi casa empezó a engordar y a perder esa apariencia de perro famélico que tenia, esta mas viejo como todos los que pasamos de los sesenta y aquella enfermedad suya jamas hizo aparición de nuevo...

Decidirme a escribir este libro no ha sido fácil por lo que en el me implica y el tener que recordar de nuevo todo ese drama vivido, pero moralmente me sentía movido a escribirlo y por cerrar al cabo de tantos años ese capitulo de mi vida definitivamente...

Quiero en este momento a punto de terminar este libro, poner un enlace de una reflexión que escribí hace años en este mismo blog y que le da titulo a este capitulo...El triunfo de la voluntad, drogas no.
Si queréis leerla pinchar en ese enlace, pues desde hace muchos años quise escribir este libro para dar ánimos a todos los que lo intentaron y no lo consiguieron, por que esa guerra no la podéis perder aunque perdáis muchas batallas en el intento...

Espero que recordéis que puse esta imagen en el capitulo 26 y explique que no había encontrado en Internet una en el que hubiera un drogadicto recuperado, una foto con un drogadicto en los huesos y después de curarse se viera rejuvenecido y como nuevo...He esperado al final de este drama para presentaros a ese Pedro que realmente fue un amigo de mi infancia pero al que no vi de mayor, el Pedro del que os he hablado en todo momento soy yo, pero también soy Antonio, Manolo, Ignacio, Juan Ramón y todos esos drogadictos que están padeciendo y sufriendo esa fatídica enfermedad, para deciros que si es posible salir de la droga. os dejo con estas fotografías que no son de Internet, soy yo mismo en distintas épocas, antes y después...

Entre estas foto hay 20 años de diferencia, aunque en ese tiempo pareciera más viejo, os la pongo para que os sirva de estimulo a todos los que al miraros al espejo, deseáis no estar vivo y en lugar de buscar ayuda hacéis como Pedro, intentar forzar la salida de este mundo por miedo al mono y el no saber enfrentar el problema. Deja de ser Pedro, o Manolo, recupera tu vida de una vez por todas,  antes de que sea tarde y sigas haciendo daño a tu familia hasta ese día que le llegue la noticia de que te encontraron en un callejón sin vida...tu puedes amigo, pero tienes que empezar sabiendo lo difícil que es y que perderás muchas batallas, pero al final se impondrá el triunfo de tu voluntad...

Este libro lo dedico de manera muy especial y con mucho cariño a mis hijos, mi orgullo.
Os dejo un fuerte abrazo, mil sonrisas y mucha suerte...

FIN


En la recta final.-Capítulo 30


Capítulo 30.-

En la recta final.-


Ayer estuve hablando con el psicólogo de Pedro, me dijo que le iba a dar el alta del centro de acogida y que a partir de ese momento tendría que ir cada quince días al centro de drogodependencia para conseguir lo que yo le propuse, estar un año bajo la supervisión del centro y su psicólogo que le harían analíticas para comprobar que seguía limpio.  Ya no tomaba metadona y  si en ese año no reincidía, le darían un certificado y el alta definitiva como drogodependiente, para el era muy importante ese reconocimiento para cerrar esa etapa...

Es algo que a mi me interesaba que hiciera por el mismo y por sus hijos, pues aunque no estaban con el, que supieran que su padre estaba curado de esa cruel enfermedad. Se encontraba en esta casa...
Un precioso chalet de dos plantas con salón de televisión, dormitorios, cocina  y todos los servicios,
ubicado en una gran parcela con jardines... Yo tenia una foto que no encuentro, de un día que estuve con el y en el jardín bailamos sevillanas en época de feria. A pocos metros está el centro de drogodependencia de la diputación de Sevilla donde el tenia que seguir en régimen de visitas.

Fui a recogerlo y como se acercaba la hora de comer lo lleve a la dorada, es uno de los restaurantes más preciado de Sevilla con especialidad de pescados y mariscos. Mientras comíamos estaba muy relajado pero no me miraba a los ojos, para mi es esencial cuando hablo con la gente que me miren y mirarlos, nunca de forma insistente, pero si mirar a los ojos, me inspira confianza...
Le pedí que lo hiciera y me confesó que se sentía muy avergonzado por lo que hizo y por traicionar mi amistad. Pedro, eso es agua pasada, ahora estás curado y ya va siendo hora de que cierres definitivamente esa puerta y enfoques el futuro con optimismo...Seguimos hablando y poco a poco se fue relajando y mirándome con franqueza a los ojos...
Lo dejé en casa para que se instalara cómodamente y me fui a la oficina a pasar la tarde, por la noche cuando llegué había echo la cena, un exquisito pollo asado con patatas arrugadas y mojo picón..
Fue la primera de muchas hermosas sorpresa que me dio en esa nueva etapa de su vida. Por la mañana lo lleve conmigo a la oficina y le dí la tarea de modificar un presupuesto con nuevos precios que le di. Era fundamental para el, que se sintiera útil y ocupado para integrarse plenamente en su nueva vida. Por su forma de trabajar, ya no dudaba en que estaba recuperado por completo.

Por la tarde estuvimos recordando anécdotas del internado en la casa cuna siendo unos críos...a veces
se pasaba hambre y muchos años después mi madre me explicó la razón...las despensas de las monjas estaban repletas de carnes y lo mejor que recibían, pero la de los niños apenas tenían lo suficiente y siempre de muy mala calidad. Mi madre envió una queja anónima y se presentó una inspección en las cocinas y despensas de los niños y las monjas, inmediatamente trasladaron muchos víveres de un sitio a otro y la superiora del centro recibió una amonestación formal y la amenaza de destituirla...La primera piedra de la casa cuna la puso el rey Alfonso XIII y Maria Eugenia en 1914, aunque nada tiene que ver con mi libro, son datos que quiero aportar junto con esta otra imagen tan hermosa que teníamos cerca de la entrada principal...

Aparte de la anécdota triste de la comida, la verdad es que vivíamos en un entorno de ensueño.
El que hiciera referencia antes a la comida, es por lo que Pedro y yo estábamos recordando de los días de escasez, esperamos junto a la piscina al camión de suministro que volcaba la verdura delante del almacén sobre el albero, era agosto con lo que supone esa temperatura en el verano de Sevilla, llegó poco antes de comer y teníamos un hambre los dos canina...conforme caían los tomates al suelo lo cogíamos y lo deborabamos sin lavar y tan caliente como una manzana al horno, en media hora estábamos echando tomate por todos los poros...total una semana en la enfermería...

Y eso no fue nada comparado con ese verano en el campamento que me comí tres melones enteros tan caliente como los tomates, los cogí directamente del camión cuando no me veían, si los melones hubieran sido de los grandes, me entierran con la barriga llena...aunque esa vez me tuvieron que trasladar al hospital, tenia trece años y hasta los veinticinco, no podía ni oler un melón sin que me dieran arcadas...como ven en la foto, nos parecíamos a las juventudes hitlerianas con nuestros rifles de juguetes haciendo instrucción...un poco de agujetas y después...a cantar el cara al sol...

Cuanto disfruté esa noche de la presencia de Pedro y su estado de animo, con eso de los tomates y mis tres melones, nos reímos con ganas y también al recordar esa ocasión en el campamento cuando ya estábamos en Virgen de los Reyes y sentados en una mesa limpiando lentejas, el me dice que tengo un alacrán subiéndome por la pierna, yo lo mire y le di con la mano, al caer al suelo lo pise con el pie desnudo y tenia que ser torero por que me clavó su espada como un maestro, el dolor al rato era insoportable y de nuevo al hospital, la verdad desde pequeño hasta ahora tenia que haber alquilado una cama permanente para mi y me hubiera ahorrado tantos viajes...En uno de los sitios que más he comido, ha sido en el cuartel de regulares uno de Ceuta, con eso que explique que era el responsable del garaje, podía pedir toda la comida que quisiera por los favores que me debían dentro del cuartel los oficiales...

Una de las anécdotas que recordamos fue del día de la patrona de regulares que estábamos obligado todos a desfilar, yo me levante temprano y cogí el camión de la basura para ir a los fuertes, ese día estaban todos los servicios suspendidos, pero aún así, me fui a una cala apartada en la playa y me metí a una roca a coger mejillones, la roca cortaba como navajas y aunque llevé muchos mejillones a la orilla, yo parecía que me habían atacado mil pirañas de la cantidad de cortes y sangre que tenia por todo el cuerpo de cada envite de las olas que me estampaban contra ellas...En el camión llevaba limón y en una plancha de metal, empece a asarlos después de hacer fuego. En media hora tenia treinta chiquillos alrededor esperando mejillones...Fue un día memorable.....

Cuando llegué al cuartel me mandaron directamente al calabozo, pero mi comandante al día siguiente me sacó, me necesitaba para que le hiciera los planos de las maniobras que se iban a hacer en Córdoba...Otro día, me fui con el cartero en un jeep a recorrer los fuertes, era el jeep del coronel y parecía Fittipaldi corriendo por las colinas de la sierra, pero me di cuenta que de eso nada cuando derrapé en una curva de piedras y caí varios metros dando vueltas por el terraplén...

Me lo arreglaron el fin de semana pero el mecánico no se dio cuenta que las ballestas estaban partidas y el coche sonaba como si se fuera a desarmar y el coronel asustado le pregunto al chófer por lo que pasaba y se lo dijo...total esa vez no me libró de un mes de calabozo ni el general que me sentó en sus piernas el día de la patrona que estaba yo de camarero sirviendo las mesas y quería que este sevillano le contara chistes, el estaba borracho pero yo más porque apunte una botella de jb a su nombre y casi me la termino allí mismo. Pero se la terminaron en el cuartel porque al llegar casi al amanecer, no encontraba ni el garaje y lo aparque delante de los dormitorios. A la mañana siguiente, los cabronazos me sacaron en procesión con cama y todo al patio y se tomaron la media botella que quedaba debajo de mi almohada. Me alegré que me despertaran  pues ese día cogía el barco para regresar a España por un permiso de navidad. La policía militar no me dejaba embarcar por mi pelo tan largo y les prometí que al llegar a Ceuta me pelaría...me pasé toda la mili con el mismo pelo.
En otra ocasión y por una apuesta me afeité la cabeza contraviniendo las ordenanzas...una semana de calabozo y en otra por otra apuesta estuve cinco días andando descalzo por el cuartel y el comedor, aduje que tenia hongos en los pies y cada oficial con el que me topaba le decía lo mismo y me pedían un certificado medico que nunca llevaba, mis travesuras me hicieron ganarme el apelativo de sevillano toca pelotas por parte de los oficiales...pero genio y figura hasta la sepultura...

Por primera vez en mucho tiempo no tuve pesadillas con Pedro, dormí como un lirón y un saco de esperanza rellenando mi colchón...

En un rincón del alma.-Capítulo 29


Capítulo 29.-

En un rincón del alma.-

Todos tenemos seguramente compartimientos especiales en el alma, esos que queremos permanezcan por siempre para no olvidarnos, esos rinconcitos que decimos están en el corazón de forma muy especial...solo es una forma romántica de decirlo por que sabemos que el corazón solo es un musculo que no tiene sentimientos, pero que más da eso...¿Acaso tenemos alma?...o todo lo que somos, pensamos o sentimos forma parte de nuestra educación, evolución o experiencias...Como esto no es un libro de filosofía y yo no tengo los conocimientos suficiente para decantarme en un sentido u otro, acepto que tengo alma y que hay cuartos especiales donde guardo mis recuerdos más preciados...

Y que recuerdo más preciado puede tener un hombre como padre que el recuerdo de sus hijos, esos que se te graban a fuego desde pequeño y te acompaña por el resto de la vida, máxime cuando esos hijos te han demostrado siempre su cariño y evoluciones de forma positiva o negativa, jamas te juzgan y te demuestran siempre su cariño y respeto.
En un rincón del alma es donde tengo a estos tres pequeños que aunque ya crecieron, en ese compartimiento permanecen inalterable y niños a lo largo del tiempo...
No importa las veces que haya visto estas fotos suyas, siempre me produce una ternura infinita y un deseo irrefrenable de poder dar marcha en el tiempo y abrazar sus pequeños y tiernos cuerpos.
Cuantas veces cuando mi vida se ha torcido, estos niños se han echo presencia en mi consciencia para darme toques de atención y reflexionar sobre mi vida para enderezarla, consecuencia del dolor que me producía, no sentirme digo de ser su padre...ellos han sido los héroes en la sombra, mis héroes....
Como permanecer impasible aunque separado de ellos por circunstancias, dejar al margen a estas tres caritas de ángeles, dulzura, ternura y sensibilidad en su estado más puro. Tengo en ese rincón del alma, recuerdos de ellos que me hacen escribir así de estos niños...me quedo extasiado mirando sus caras y me gustaría tener una maquina del tiempo que me trasladara de inmediato a esa época, abrazarlos de nuevo y aunque no me entendieran decirle solo una cosa, perdón por mi alejamiento, perdón por mi egoísmo, perdón por la locura en la que convertí mi vida...Pero se que ahora no tengo que pedirles perdón por nada, ellos no me lo aceptan porque dicen no tener nada que perdonarme, que si hice algo mal ellos no lo recuerdan y que eso tiene que estar solo en mi imaginación por sentirme culpable de algo y me demuestran su sinceridad sus comportamientos...Son esos gnomos de jardín que hubiera puesto a la entrada de mi casa. Doy por bien empleada mi vida por ver llegar a ver a estos niños convertirse en unos hombres guapos por fuera, pero inmensamente guapos por dentro...y sentirme tan afortunado de tenerlos..
Que cara más linda y pilla la de Miguelillo, pero que cara de felicidad la mía con el...como no quedarse con imágenes como estas y los recuerdos que afloran con ellas, la alegría que transmiten.. 

Mirando esta foto escribí hace años un poema que está en este blog que se llama Día de feria...Aunque estos niños ya han crecido no me los quito de la mente con esas edades, pero el mejor regalo que he tenido solo hace unos días en los que cenando con David y Sergio, me hicieron eso tan moderno que a mi se me escapaba, un Selfie, pero con el ya no se me escapa la instantánea para contemplar esos dos hombres en los que se convirtieron y que siguen tan dentro de ese rincón de mi alma para que me acompañen en los días de soledad mirándolos y diciéndoles, gracias hijos míos...


De todas formas no puedo dejar de terminar este capitulo sin este hermoso recuerdo de su madre y la mía, una madre que estuvo en todo momento con ellos y una madre para mí que era la envidia de cualquier madre por su inmensa bondad y amor para mi y para ellos..Gracias a todo los que aún siguen en este mundo y a los que se marcharon por haber formado parte de mi vida y por haberos metido tan dentro de ese rincón de mi alma...

Hoy me he dedicado este capitulo, pero el próximo será para ese gran amigo mio Pedro, que está a punto de salir del centro de drogodependencia con un gran y prometedor futuro por delante.....

Les deseo un fabuloso y feliz fin de semana a todos...no abandones nunca tu lucha....

Despropósitos.-Capítulo 28


Capítulo 28.-

Despropósitos.-

No quería hacer este libro largo con los despropósitos, pero tenia en mis notas el asunto de un día que se presentó en una oficina portátil que tenia en la calle Virgen del Valle de Sevilla.

Hasta el momento de yo hacerme cargo de la construcción de sótanos de garajes y pisos encimas, había sido un cine de verano y posteriormente una pista de tenis. En plena excavación se me presentó en la oficina diciéndome que estaba limpio y necesitaba trabajo. Lo acepte y le dí unas indicaciones para el de la excavadora, medidas de los pozos medianeros y la general de la losa de cimentación.

En veinte días no tuvo problemas y acudía a su hora al trabajo, pero un día que le dí dinero para que comprara unas cosas en la ferretería, no apareció mas en todo el día. Al día siguiente me llama por teléfono diciendo que acababa de salir del hospital, lo cogió mi secretaria yo en ese momento estaba en urbanismo y le dice que estaba descalzo porque lo recogió una ambulancia de su casa pues se puso enfermo y que por favor le enviara dinero con alguien para comprarse unos zapatos...

Mi secretaria le dio dinero a un trabajador para que se lo llevara. Inmediatamente el se fue a comprar droga. Cuando apareció por la oficina estaba yo allí y llegaba con los brazos vendados...

Le pedí que me explicara lo que había pasado y que me dijera la verdad... El día anterior en el que le dí el dinero para comprar, se fue directamente a comprar droga y después no tuvo valor para enfrentarlo conmigo y se fue a su casa, vivía de ocupa en una vieja vivienda. Por la noche, el remordimiento de lo que había echo y el pensar que no tenia dinero para comprar al día siguiente, lo llevó a la salvaje decisión de cortarse las venas con un cúter de los que me tomó de la oficina...Estuvo desangrándose asomado a la barandilla del patio esperando tener valor para tirarse, pero empezó a sentirse mal por la falta de sangre y bajó a casa de la vecina diciéndole que se sentía muy mal...me imagino esa pobre señora con el vecino en su puerta sangrando por los brazos...Lo ingresaron y le dieron punto en ambos brazos, por la mañana, el psicólogo del hospital Virgen Macarena, le preguntó que por que había echo eso....el le dijo que estaba arrepentido, que nunca hay que llegar a eso, que lo empujó su necesidad a la droga pero que había recapacitado y por el mismo ya no iba a consumir más...Mientras le decía eso al psicólogo, estaba pensando en como conseguir dinero para comprar...lo consiguió de mi secretaria y después de ponerse bien, apareció por mi oficina con los brazos vendados pidiéndome perdón y diciéndome que jamas le iba a ocurrir de nuevo. Lo eché de la oficina y como en otras ocasiones, le dije que de mi se olvidara.

Cada vez que me pasaba algo con el, meneaba la cabeza en señal de negación diciéndome que era imposible que ese Pedro fuera mi querido amigo del alma con el que tan buenos momentos había pasado tanto en mi infancia como en mi adolescencia en los internados en los que estudiábamos.

Aquí nos hicieron una foto con el cura que nos daba clase de música en la rondalla...pero también seguíamos juntos cuando ya más mayor disfrutábamos en el otro internado de los meses de verano en la playa del puerto de Santa Maria...
Como llega una persona a degradarse tanto, como para dejar que sus problemas afecten de esa forma a un amigo y reiterarse una y otra vez en tamaño despropósito. Quizás esa pregunta ahora no la responda, yo en aquellos tiempos no tenia la respuesta, pero ahora creo tenerla y será parte de mi propósito en este libro para llevaros a la comprensión de este grave asunto y su solución...pero la solución pasa solo por la decisión firme del individuo enfermo con el objetivo puesto siempre en el futuro inmediato de recuperase cueste lo que cueste. Nadie lo va a curar, la persona se cura a si mismo con voluntad y la metadona y los psicólogos, solo son una ayuda...Si antes de empezar con un programa de desintoxicación, no tienes claro tus objetivos será una perdida de tiempo...no solo eso, si no que con cada fracaso, tu voluntad queda mermada costandote más la próxima vez para intentarlo. Si estas leyendo esto, solo te digo una cosa...¡Échale cojones, joder¡

Vestida de loba.-Historia 27

Historia 27.- Vestida de loba


Soy una buena persona y tengo todo mi derecho a autoproclamarlo...solo tengo una cara que es la que muestro, aunque tantas veces he visto en mi marido esa transfiguración que se produce cuando se enfada y quiere convencerme a base de gritos de las razones por las que grita, siendo precisamente sus gritos los que lo descalifica ante mis ojos...

Desde que éramos novios, creí que mi docilidad seria mi mejor arma para luchar contra esas situaciones dolorosas que llevan a la pareja al desacuerdo continuo y a las lágrimas.
Yo no quería esa situación para nuestro matrimonio y ante cualquier conato de rivalidad tenía en mi boca un...sí, creo que tienes razón y sin más explicación daba el tema por zanjado.

Esa actitud mía pude sostenerla durante un tiempo, pero llegó un momento en que sentí que perdía toda mi autoestima doblegándome continuamente a los pensamientos machista de mi marido haciéndome sentir anulada como mujer y como persona... ¿Qué hacer para no morir emocionalmente en el intento?...solo me di una respuesta posible...vestirme de loba...

No iba a dejar de ser buena persona, pero si me cubriría la espalda con el alma del animal más noble y luchador, a esta amiga recurriría a partir de ahora para que me diera fuerza en mi lucha ante la injusticia del trato machista de mi pareja. Solo tengo que convencerme que realmente la tengo cubriendo mi espalda y que será realidad en mi mente para en lugar de agachar la cabeza y acobardarme, erguirla bien alta y luchar con la bravura de un corazón libre...

Lo que escribo para ti querida amiga sé que es pura metáfora, pero son en estas metáforas mías donde se encuentran las formulas y es en cada entrada de este libro, Todas las mujeres son iguales, donde encontraras la punta del ovillo donde podrás desgranar algunas soluciones para tus sinsabores.

La ruleta rusa.-Capítulo 27



Capítulo 27.-

La ruleta rusa.-

No puedo saber cuantas personas se enganchan en las drogas desde muy jóvenes, es una edad difícil en que el carácter no esta suficientemente formado y se puede caer muy fácil en la tentación de experimentar nuevas sensaciones. Puede que la primera vez no pase nada, pues el cuerpo necesita de una continuidad para habituarse y que se manifiesten los primeros signos de abstinencia que es cuando realmente el asunto es grave si no se para a tiempo. Pedro jugaba continuamente a la ruleta rusa...Llegó un momento en que no se negaba a participar de cualquier cosa que le ofrecieran.

En una ocasión tomando una copa en mi bar de la calle Betis de Sevilla, cuando ya habíamos cerrado, un americano que estaba dentro, tomó un plato y puso un trozo de pan en el centro, le clavó un palillo de dientes y sobre el dejó pinchado un trozo de hachís...a continuación le prendió fuego y lo apagó tapándolo inmediatamente con una copa. La copa se llenó de humo y le dijo que la cogiera y aspirara el humo de forma rápida, lo vi que empezó a sentirse mal y que no podía respirar bien, decía que necesitaba aire, el sudor lo invadió enseguida diciéndome que era un sudor frío. le abrí la puerta de la calle para que saliera a respirar y no tardó ni cinco minutos en caer redondo al suelo...

Me dio un susto de muerte y lo metimos de nuevo en el bar, en media hora se fue recuperando y creí que ya no volvería a hacer una tontería como esa...pero hizo otras diferentes y a cada cual peores...
Era como un pájaro con la boca siempre abierta para aceptar cualquier pastilla o ácido que le dieran.
Estaba sentado jugando al ajedrez con un cliente y desde la barra observe que abría la boca y le metían algo, a los veinte minutos aproximadamente estaba sin conocimiento tumbado en el suelo, nunca me enteré de lo que le habían dado, pero como tomaba mucho alcohol, todo le hacia daño. Solo estuvo en esa ocasión siete días en Sevilla, pero le rogué que no volviera por el bar...

Quien me iba a decir que ese niño con cara de bueno, lo podría ver en situaciones semejantes. Por que unas personas que prueban la droga nunca vuelven a consumirlas y otras sin embargo desde la primera vez se quedan enganchados, sin que haya aparecido el síndrome de abstinencia. Creo tener una teoría al respecto. Hay personas que el día que la prueban solo es por experimentar, si en ese momento está pasando por una situación personal difícil y la droga lo evade haciéndose sentir mejor, cuando vuelva a sentirse mal o triste, se acordará de eso que sintió y querrá de nuevo tomarla para sentirse bien, sin percatarse que cada disparo, lo esta acercando cada vez más a esa bala irremediable que surgirá de pronto para llevarlo al abismo sin remedio. Es un juego muy peligroso al que no hay que jugar, pues tarde o temprano el síndrome de abstinencia va a llegar haciéndote un esclavo.

Prefiero recordar a Pedro en muestras andaduras juveniles del internado. Le gustaba mucho el deporte como a mi y cada tiempo libre jugábamos a voleibol, balón cesto o a tenis de mesa que nos encantaba, los fines de semana estábamos continuamente pidiendo turnos en la mesa...
Pero sobre todo pasábamos temporadas fabulosas en el campamento de verano, aunque se trabajaba mucho en acondicionar los alrededores para señalizar calles con piedras pintada de cal, recoger las piñas secas caída de los pinares y estudiar las batallitas y estrategias de los conquistadores españoles..Me hubiese gustado quedarme en la inocencia de esos años donde se podía ser feliz solo con desearlo, tener la capacidad de vivir mi propio mundo sin dejar el mundo que me rodeaba con los amigos y los sueños de héroes de la conquista sin conquistar nada sin tener esta pesadilla que aunque sin buscártela, te haga sentir que la vida juega contigo a la ruleta rusa. Pero no me engaño, no es la vida quien juega, somos nosotros cuando cambiamos las balas de fogueo, por esas otras de plomo macizo que son las drogas y otras sustancias que algunos desaprensivo ponen en el mercado para nutrirse de tus despojos llevándote a una muerte lenta... 

Ya solo queda un mes para que Pedro termine su tratamiento, me siento bien  y como decían los versos de Góngora,... 

Ándeme yo caliente y ríase la gente...

Traten otros del gobierno del mundo y sus monarquías,
mientras gobiernan mis días  mantequillas y pan tierno,
y las mañanas de invierno naranjada y aguardiente, y ríase la gente.

Parece que siempre que me relajo en un capitulo sin muchas alteraciones, es por que la tragedia de nuevo esta a la vuelta de la esquina, como en este próximo capitulo llamado despropósitos... 

Tatuajes.-Historia 26

Historia 26.- Tatuajes

Rosalía se hizo un pequeño tatuaje en el hombro que a su marido Salvador no le gustó, tuvieron una fuerte discusión y le dijo que eso de los tatuajes era cosa de putas y de niñatas...Mira, yo soy un hombre formal y serio, con un puesto de trabajo importante y no voy a permitir ser el hazmerreir de la gente por tu culpa...
Salvador tu divagas, sabes que siempre estoy en mi sitio y un tatuaje no va a cambiar mi manera de ser, me he tatuado tu nombre con una mariposa diciendo te amo, no creo que puedas tener duda a quien va dirigido y lo que piensen los demás a mi no me importa, siento que seas tan inseguro...

¡Yo inseguro¡ por pensar que mi mujer parece una cualquiera con tatuajes...a partir de ahora te pones vestidos que te tapen los hombros, no quiero volver a verlo...

Rosalía toma su bolso y se va a la calle, al cabo de tres horas se acerca a su marido y se quita la blusa, en la espalda tenía un tremendo y bello tatuaje y él se queda con la boca abierta...pero como has podido después de lo que te dije esta mañana...lo que me dijeras esta mañana a mi no me importa, sabes que te amo, pero no voy a permitir que coarte mi libertad y me digas que tengo que hacer o dejar de hacer con mi cuerpo, no pensaba hacerme más tatuajes, pero tu intransigencia me ha llevado a hacérmelo para dejarte clara mi libertad...

Salvador la toma con fuerza y la tumba sobre el piso, arranca la cuerda de la cortina que tenia al lado y la ata, una vez inmovilizada va a por un baño con agua, estropajo y jabón y empieza a restregárselo fuertemente sobre los tatuajes...le hace daño y llora de impotencia, la piel le empieza a sangrar y el sigue...no voy a parar hasta borrártelo, ella grita de dolor pero el impasible sigue con la tortura.

Cuando Rosalía pierde el conocimiento y el ve que la piel había desaparecido, la acuesta y le cura su maltrecha piel...

Cuando ella se recuperó no dijo nada, no quería hablar con él solo que la dejara tranquila, pero ella no quedaría tranquila hasta que el infame de Salvador pagara por lo que había echo...
A él le gustaba dormir la siesta y ella preparó unos somníferos machacados que echo sobre la leche caliente que se tomaba antes de irse a su cuarto, quizás se había pasado pensó, por que al verlo caminar parecía un sonámbulo. Espero cinco minutos y lo siguió hasta su cuarto donde roncaba profundamente dormido...era el momento y llamó por teléfono a su tatuador...

En quince minutos su marido estaba siendo tatuado, una serpiente en la parte derecha de su rostro que le ocupaba desde la frente hasta la barbilla.

En la parte izquierda arrancaba desde el cuello dos testículos donde nacía un grueso falo que apuntaba en medio de su boca...la tatuadora se le quedo mirando y le dice, ¿no crees que te has pasado?, ella sin inmutarse se quita la camisa y le enseña su espalda sin piel...se lo merece, dice...

En el buen camino.-Capítulo 26



Capítulo 26.-

En el buen camino.-

He pasado seis meses sin ir a ver a Pedro, prefería esperar a ver como evolucionaba, no era mi intención verlo, solo hablar con su psicólogo que me dijera como estaba.

Me vine con muy buena impresión, le habían rebajado cada semana la metadona y de ochenta con lo que empezó el tratamiento ya solo tomaba cuarenta y sin signos de ansiedad o dolores físicos, se sentía muy animado, participaba en todas las salida y talleres del centro y si sigue así en seis meses más estaría sin metadona,  pues se la iban a seguir rebajando de acuerdo con sus propios deseos...

En una ocasión que hable con el, le advertí que la metadona es una droga mas pura y fuerte que la heroína que venden en la calle y la única forma de dejarla es rebajándola poco a poco y potenciar su autoestima realizando trabajos que le ocupen y le haga sentirse útil como persona, así superará la depresión que tiene y dejara de sentir que es un miserable.
 Esa conversación me había alegrado el día, parecía como si una gran losa que me estaba aplastando de pronto apenas pesara y me dejaba liberado, iba hacia el restaurante la dorada que había quedado con un cliente para comer y no dejaba de silbar canciones en el coche. Busqué antes de llegar el libro,
Autoayuda, combatir adicción a las drogas de la referencia que me dio Enrique el psicólogo.
Me impactó una de las imágenes que traía de una mujer joven antes y después de consumir drogas...
Me hubiera gustado encontrar alguna foto de este tipo de cuando consumían droga y después ya recuperados, pero no encontré nada en librerías ni en Internet, pensaba que así podía verse en un futuro inmediato cuando estuviera totalmente recuperado...para que le sirviera de aliciente.
La comida transcurrió bien y fue exitosa como terminó al llegar a la oficina con el cliente y aceptar el presupuesto de unas viviendas que quería encargarme, el día no podía ser mas completo.

Ahora que estoy escribiendo este capitulo, me siento feliz y relajado por que no tengo pesadillas que contarles, o aunque si las tengo, no quiero hoy hurgar en mi memoria para terminar el día con el alma tranquila, aunque todos sabemos sobre esos días que nacen con un sol radiante y lleno de promesas y cualquier eventualidad lo termina nublado y con truenos...yo prefiero hoy cruzar los dedos y quedarme con lo bueno que el día me ha deparado...

En la noche, antes de dormir repasé algunas notas que tenia para el libro y di con una anécdota de un día de reyes cuando teníamos ocho años y nos vistieron de rey mago para ir a llevarle juguetes y caramelos a los niños del hospicio de San Luis, otro internado que estaba en el centro de Sevilla donde había también un colegio de sordomudos. Tiene una iglesia que es una obra de arte...

En algunas ocasiones que estoy cerca, me gusta entrar y sentarme en un banco a contemplarla y escuchar música de órgano que ponen como fondo y me relaja mucho. En una ocasión que me encargaron un proyecto de rehabilitación de toda la calle, inserté entre las fachadas, la fachada de esa iglesia dibujada a plumilla con todos sus detalles, mi madre la conservó toda su vida.

Pues el camino hacia San Luis que lo hicimos andando, fue un verdadero martirio, la barba me picaba más que la que me pusieron en el nacimiento como san José, pero ademas como iba de rey negro, el betún con que me pintaron la cara, me chorreaba por la cara del sudor cuando nos hicieron correr hacia el colegio por que llegábamos tarde, mis dedos estaban negro y mi cara al llegar parecía que había pasado un arado, la tenia llena de surcos blancos. Pero fue algo memorable cuando entramos en el colegio de sordomudos, ver la cara de felicidad de esos niños prácticamente de nuestra edad y hablándonos por señas con las manos que no conseguíamos entender, pero con sus sonrisas entendimos lo suficiente...