Vanesa, La dama de azul...

Vanesa, La dama de azul.

Vanesa solo se casó una vez con un naviero de cincuenta y seis años, Pancho, de origen mexicano y afincado en Sevilla, más feo que pegarle a un padre y con las redondeces exageradas de estar comiendo todo el día burritos y tomando cerveza.
Era un buen tipo, empezó de la nada construyendo pequeños botes con sus propias manos, una vida de plena dedicación a su trabajo le hizo aumentar el tamaño de sus barcos  y se trasladó a la bahía de Cádiz donde construyó su propio astillero.
El nunca pensó en el matrimonio, tenía suficiente con las visitas continuas a los prostíbulos de los que era un ciudadano V.I.P.

En los primeros escarceos amorosos con Vanesa, ella tuvo que contener más de una vez las ganas de vomitar cuando la besaba, por dentro intentaba convencerse que ese sacrificio merecía la pena y aguantaba el tipo como podía. Pensaba que tenía que hacer de tripas corazón para llevar a ese primo hasta el altar…Leonora siempre le recordaba que ese era su objetivo principal…ese y despacharlo pronto al otro barrio…

Pancho dijo si quiero a los siete meses de conocer a Vanesa y se sentía el hombre más afortunado de la tierra, aunque su mujer le dijo siempre que era virgen y ella gritaba de dolor cuando Pancho intentaba emular a don quijote con su lanza en ristre…gritaba y paraba las embestidas de Pancho que desesperado, volvía a sus recorridos nocturnos para engrasar su lanza…

El naviero ya no trabajaba en sus barcos, pero si le gustaba inspeccionarlo como buen constructor que desea todo esté en perfectas condiciones. Visitaba en el dique seco la zona de babor de su ya casi terminado barco, un andamio colgante se desprendió cayendo al vacío y Pancho terminó viajando por el túnel de la luz mientras escuchaba estas son las mañanitas a los mariachis que había junto a San Pedro…Pancho parecía un burrito relleno de tomate esparcido por el suelo...

El diagnostico oficial fue, muerte por accidente. El cableado del cuadro eléctrico de un servo freno que mantenía el andamio sujeto, se había fundido por un corto circuito…
El jefe de electricista de su naviera recibiría su recompensa, aunque no duró lo suficiente para poderla cobrar, Lucrecia le encargó el trabajo a un Serbio muy discreto bien recomendado y se ahorró ciento sesenta mil euros, que por supuesto iban a las arcas de Lucrecia que era como una caja registradora…

Vanesa reclamó su cuerpo y se lo trajo a su casa de Sevilla, algunas manipulaciones
no del todo legales, le permitieron embalsamarlo y llevarlo al salón de trofeos de la mansión de Lucrecia…

En la comisaría central sevillana, en la unidad especial de homicidios, un agente tenia sobre su mesa tres nombres para investigar, Lucrecia, Beatriz y Vanesa, pronto añadiría dos nombres más a esa lista. 

El senador seguía con sus prismáticos y sus grabaciones, que con ayuda de un miembro del servicio secreto, se trasladaron al interior de la mansión de Lucrecia…pero había zonas inexpugnables de la casa, donde no pudieron acceder a colocar vigilancia.


La policía entrevistó a Don Tomas para averiguar algo de lo que podía saber de su anterior protegida Lucrecia, pero el senador se mantuvo firme en que no sabía nada y no volvieron a molestarle… el político millonario,  tenía sus propios planes…

Capitulo 3.-Matanza múltiple

Capitulo 3.-Matanza múltiple

Estábamos en la cueva donde dábamos buena cuenta de nuestras victimas, la cueva donde vivían los perros antes de unirse a mí, la entrada estaba perfectamente camuflada por unos matorrales, aunque alguien pasara delante de la entrada, no la vería.
Las voces que se alejaban, de pronto la escuchamos más cerca, permanecimos todo el día en el interior de la cueva, una voz se alzó sobre las demás en un grito…Eva Mariaaa
¿Donde estas hija miaaaa?, en cada grito, solo se obtenía el sombrío eco del silencio…
La oscuridad se hizo dueña de la belleza que infería el astro rey al frondoso espectáculo del monte, los tétricos ruidos de la noche, hacían tener los cinco sentidos alertas…

Me asomé al exterior cuando la noche era totalmente cerrada, una pequeña hoguera lucia cercana, le hice señas a los perros con mi dedo  índice sobre los labios en señal de silencio, conminándoles  a salir a la oscura noche sin luna.
Como si fueran soldados, los perros reptaban junto a mi en dirección a la hoguera sin escuchar ya ni un solo susurro de esos hombre…cuatro bultos aparecían ante la débil luz de las llamas, sus escopetas descansaban sobre sus cuerpos dispuesta a la acción ante la menor señal de peligro…pero no estaban preparados para el peligro que se les echaba encima en forma de animales y uno mas animal con cuerpo de hombre…

La acción se desarrolló de forma rápida y quirúrgica, como solo los cuerpos de élite las saben ejecutar,  un perro estaba a la altura del cuello de uno de los hombres, el otro acechaba a su compañero y yo sobre el que estaba cerca durmiendo con su amigo…
A mi señal, de una sola dentellada los perros acabaron con su presa destrozándole la garganta, yo con un certero golpe de mi maza le abría el cráneo a mi victima, no murió inmediatamente,  sucumbió antes de coger su escopeta a otro contundente golpe, ese segundo golpe permitió a su amigo perderse entre los arbustos y desaparecer…

Los perros ajenos a mi orden para que lo persiguiera, se daban un buen festín, el silencio se hizo absoluto a nuestro alrededor, el sonido que producían al desgarrar la carne y triturar los huesos, era demasiado aterrador para los animales nocturnos del entorno que permanecían en completo silencio.

Aproveché la pequeña hoguera para echar unos trozos de carne, pues aunque la prefiero cruda, en una incursión nocturna a los alrededores de la aldea,  tome sin permiso un conejo que un hombre asaba sobre la lumbre, no pedí permiso por que los muertos no te lo dan y ese hombre estaba bien muerto después de que mi maza se encargara de él…

Cuando quedamos satisfechos, limpie todos los rastros de nuestro paso y el de los hombre por el lugar, yo cavaba y los perros traían los despojos de sus presas para echarlos al agujero, apagué el fuego y enterré las cenizas y los palos calcinados, cuando terminé la operación, nadie podía imaginarse nuestra presencia o la de esos hombres, pero había un cavo suelto que no me podía permitir dejarlo así, aunque de forma fugaz, el que escapó me había visto la cara y jamás se le olvidaría…

Estaba en esos pensamientos cuando un grito rompió el silencio de la noche… asesinos, os daré muerte aunque tenga que bajar al mismo infierno…el eco de un disparo como una sentencia, se propagó germinando como una venganza plantada en la tierra…

Ángel Reyes Burgos

Historia 3.- 24 centímetros.

Historia 3.- 24 centímetros.
Sancho y María, era un matrimonio joven que apenas llegaban a la treintena y muy apuestos, llevaban una vida sexual activa y cualquiera que los observara podían sin duda asegurar que se querían mucho, los gestos de cariño siempre estaban presente entre los dos y sobre todo esa forma de mirarse que tenían y que es tan importante entre las parejas, porque los ojos transmite mucho más que las palabras. Los ojos pueden transmitir ternura, amor, irritación, dolor y toda una serie de sentimientos cuando las palabras están vacías.

En una conversación entre los dos, María le dice...chato, se que te gusta mi cuerpo, pero mira que pechos más pequeños, daría cualquier cosa por que fueran más grandes porque se que a ti te gustan hermosos... pero sabes que por nada me metería en un quirófano para agrandarlos...

Él le resta importancia al asunto diciéndole que no se preocupe, que le gustan como están, pero al momento empieza a tener una erección pensando en la camarera de tan generosos pechos con la que se acuesta lunes y jueves desde hace seis meses...Ella insiste y se da la vuelta en la cama poniéndose boca arriba, ¿no ves?
a mi misma me encantaría poder acariciar mis pechos si fueran generosos y a veces hasta miro los de otras mujeres deseándolos...el la mira sorprendido y le pregunta...¿acaso te gustan las mujeres?...no he dicho eso, solo que a veces he pensado eso por ti y por mi...

A el se le ocurre una idea, ¿por que no pruebas con otra mujer a ver qué te parece la experiencia?, yo no tengo miedo que me dejes por que se que me amas y que te gusto. Ella se queda pensativa y tocándose los pechos dice, pues sería una excitante experiencia poder acariciar unos firmes y generosos, pero no conozco a nadie...no te preocupes, yo conozco a una mujer hace tiempo y podría hablar con ella a ver qué le parece... ¿Harías eso por mi chato?, que no voy a hacer yo por ti palomita...pero María le advierte que sus celos no le permiten aceptar que él esté con otra mujer y que solo sería una experiencia de ella con la otra, no te preocupes, yo te la traigo el sábado solo para ti...

Desde el momento en que entra el sábado por la noche en casa del matrimonio a cenar y María ve ese escultural cuerpo apenas cubierto por una minifalda negra y una escasa blusa blanca semitransparente, María se vuelve loca de impaciencia por hacer causa de esos pechos y los pezones que pugnan por atravesar la blusa ante las miradas de deseos del matrimonio...Loli, que así se llama el objeto de deseo de los dos le pregunta a María, ¿sabes porque estoy aquí?, si, se lo pedí yo a mi marido y aunque jamás hice nada parecido, quiero comprobar si solo es un capricho pasajero o es mi fijación por los senos grandes.
Pues ahora terminemos de cenar y después yo te sacaré de esa duda...

Al terminar de cenar, se llevaron las mujeres los platos a la cocina mientras Sancho preparaba unas copas, María le pregunta a Loli, ¿de qué conoces a mi marido?, ella le contesta que es camarera de un bar al lado de su trabajo y que se hicieron amantes hacia seis meses...María contuvo el dolor que estaba experimentando, pues jamás hubiera pensado que su marido le pusiera los cuernos, pero con la frialdad de una mujer, pensó inmediatamente en su venganza...en cuanto se tomaron la copa, María levanto a Loli y allí mismo le quitó la blusa y la falda y con la mano en su trasero la encaminó hacia el dormitorio mientras volvía la cabeza para decirle, tu hay quieto so cabrón...el se quedó con los ojos muy abiertos sin comprender.

Se había quedado dormido en el sofá y no se enteró de cuando Loli se marchaba de la casa, vio a su mujer salir desnuda hacia la ducha y le preguntó, ¿qué tal te ha ido chata?...ummm, delicioso. El fue a abrazarla y ella se excuso diciendo que estaba muy cansada y desde ese día,  no volvió a hacer el amor con su marido por que había acordado con su nueva amante verse los lunes y jueves a la misma hora que lo hacía Sancho.
El salir desnuda, formaba parte de su nueva estrategia de excitarlo para parar sus ardores sin dejar que la tocara...en la ducha sonrió y pensó, Sancho, no sabes la que te espera...

María se estaba cansando del asunto con Loli porque al fin y al cabo su acalorado refugio reclamaba ser ocupado y empezó a frecuentar los ambientes transexuales, pensó que podía sentirse más completa si llenaba ese deseo continuo de disfrutar con unos generosos pechos mientras se sentía buena samaritana cobijando en su interior a un sin ojos... porque para estar dentro no lo necesitan...

Conoció a Ester, una rubia de piernas interminables y unos pechos adorables que no eran producto de la silicona, pero sí de las hormonas  y por primera vez se sintió completa cuando tuvo el placer de sentirse entre sus pechos mientras algo enorme le hacia las delicias entre sus muslos...

Ya se sentía preparada para culminar su venganza y se encaminó a la casa de su marido, lo llevó frente a el para presentárselo... esta es mi nueva amante, espero que te guste, primero le quito la ajustada camiseta que sujetaba lo que apenas podía sujetarse por que pugnaban por salir, dos hermosas preciosidades con unos pezones impresionantes que desafiaban a la naturaleza...Sancho se quedó con la boca abierta y la cerró de golpe cuando su mujer levantaba la falda de Ester y bajándole las bragas dejó al descubierto 24 centímetros de algo que parecía no haber existido nunca y allí lo tenía delante...lo dejó desnudo presentando armas y mirando a su marido dijo, voy a por mi ropa y tocando su trofeo comentó, no dejes que ese guarro te toque.

Ángel Reyes Burgos

Una verdad incómoda. Capítulo 3.-

Capítulo 3.-

Una verdad incómoda.

He recibido una llamada de Pedro pidiéndome que lo vea para hablarme de un asunto importante, la primera impresión que tengo al verle es deprimente, vuelvo a recordar ese sueño que tuve y todo indica que se va a hacer realidad, esta desaliñado y sucio, sus dedos negros evidencia el consumo de heroína inhalado en el papel de plata que deja ese rastro negro como de carbón, pronuncia un buenos días entrecortado y lleno de nerviosismo para espetarme inmediatamente, dame doce euros por favor lo necesito, no puedo estar de pie...en ese momento no puedo acceder al recuerdo de ese niño guapo de mi infancia tan lleno de vida y de carisma, lo que tengo delante es un despojo humano que ha perdido en su rostro todo atisbo de humanidad...le digo que no, no voy a alimentar su problema haciendo que consuma más, sus lágrimas asoman mientras me dice que no me volverá a pedir dinero, que lo necesita para sentirse bien para afrontar una entrevista de trabajo...

Es la primera noticia que tengo de que su empresa había pasado a mejor vida y carecía totalmente de recursos propios, su mujer hacía tiempo que se había ido con los niños y su amante cayó con el en ese pozo de desesperación en lo que se había convertido su vida. A Lola la amante, la reconocí en una esquina apartada a su espalda, era la sombra de esa mujer que un día entró tan voluptuosa en el pub, intentó sonreír al mirarme y una boca sucia y desdentada con algunos dientes negros le confirieron un aspecto repulsivo, me estremecí al ver lo que la droga puede hacer con las personas en tan poco tiempo, aunque ya había visto a muchos en esa situación, esta vez me estaba dando de lleno por mi cariño hacia ese gran amigo de mi infancia...

Retomo mi conversación con el olvidando la visión de Lola, te voy a ayudar hoy Pedro, pero solo a ti, te vas a venir a mi casa a ducharte y cambiarte de ropa y después te acompañaré a esa entrevista de trabajo, Lola que se busque la vida como pueda, si estás de acuerdo vente conmigo.

Al entrar en mi coche veo a Lola salir corriendo para donde estábamos y yo sin hacer caso de sus llamadas acelero y abandono el lugar camino de mi casa, en una esquina, Pedro me pide que pare y le dé el dinero, le doy los doce euros y se encamina hacia dos adolescente que tenían que estar aún en el instituto y dándole el dinero le reclama su mercancía...

En el coche no dejaba de bostezar y moquear, decía que le dolía todo el cuerpo y no se sentiría bien hasta que se pusiera...empecé a aprender palabras extrañas para mi como, mono,  ponerse, bazuco, chute y un sin fin de extraños modismos utilizados entre los drogadictos.

Le pedí que se metiera antes que nada en la ducha, su olor me resultaba insoportable, pero su mayor e imperioso deseo era quitarse el mono y se sentó en el suelo, sacó una jeringuilla sucia del bolsillo y una cucharilla y yo empecé a protestar, de eso nada Pedro, en mi casa no te vas a pinchar...
En ese mismo instante comprendí la tragedia de mi amigo y el punto en el que se había hundido...
haz lo que tengas que hacer pero no delante mía, vete al cuarto de baño y espero que salgas preparado para esa entrevista, te voy a sacar ropa limpia...

Cuando salió del cuarto de baño parecía un hombre nuevo, su rostro había cambiado, su cuerpo parecía más erguido, su humor era de nuevo excelente, pero no me dejé engañar por ese aparente cambio, sabía que en cuanto su cuerpo necesitará una nueva dosis, todo empezaría de nuevo con el, deseaba llevarlo a la entrevista y por muy doloroso que fuera para mi, deshacerme de su presencia a la primera oportunidad que se me presentara, no permitiría de nuevo que entrara en mi casa o me implicara en eso que hizo de parar a comprar drogas con lo que suponía de peligro para mi...

Ya en la calle le pregunté por la dirección de esa entrevista, balbuceo un instante y me confesó que no había tal entrevista, necesitaba imperiosamente esas dosis y al verme no se le ocurrió otra forma de conseguirla conmigo...lo mire a los ojos y en ellos no había remordimientos ni sentimientos, me dije a mi mismo que no volvería a verlo y menos a ayudarlo en ese sentido, se instaló en mi mente un vacío provocado por esa verdad incómoda e intangible que te aprisiona el pecho y de mi mente desapareció ese niño de antaño que tanto quise.


Beatriz, la dama de rojo.. intriga policíaca.

Beatriz, la dama de rojo.

La señorita Beatriz tenía un año menos que Lucrecia y al cumplir sus dieciocho años se fue a vivir a su mansión, era algo que le había prometido a todas sus amigas, cuando salieran del internado ella las acogería.
El tiempo que había estado con el senador, Lucrecia se dedico a conocer a todos sus amigos y a tomar notas de su agenda, direcciones, teléfonos, estado civil…todo los datos que pudo recopilar de esos millonarios y poderosos señores.

Comenzó a dar fiestas privadas para que Beatriz conociera a esos señores, después de probar con algunos bajo el auspicio siempre de Lucrecia que la asesoraba, la preparó para una cena intima con un joyero judío multimillonario de cuarenta y dos años y por suerte para ella, viudo…Tuvieron tres cenas más antes de que ella aceptara perder la vergüenza, que por supuesto la perdió con el jardinero del internado como Lucrecia

El viudo no pudo resistirse a ese bombón de dieciocho años y perdió la cabeza por ella, en principio solo por decir si quiero ante el altar y despumes en el crucero de viaje de novios en el yate de Jacob su marido, por perderla definitivamente al caer accidentalmente por la borda. Le costó cinco millones la ayuda del capitán del  yate…aunque no llegó a pagarle porque un mafioso que le hacía trabajos al senador, por cien mil euros acabó con el capitán en la habitación de un hotel.

Avisaron por radio a los guardacostas para ver si podían rescatarlo, no lo encontraron hasta los tres días y ella pidió un permiso para embalsamarlo y dejarlo en la mansión. De esa forma se sentiría menos triste por su pérdida teniéndolo en casa…¿O tendría otros oscuros motivos?.

Jacob tenía en Sudáfrica concesiones de minas de diamantes y negocios de  joyerías en Europa y Estados Unidos. Beatriz tenía joyas en los cinco continentes de su cuerpo.

Beatriz quiso guardar luto protocolario por el que dirán y por hacerse la estrecha que es la forma en que más se encabrona y decide a los tíos conseguir a una mujer. Se aficionó y especializó en los joyeros, tardó un año en casarse de nuevo con un mercader suizo relacionado con el tráfico de diamantes, Marcial, tenia cincuenta y dos años una mujer, una amante y tres hijos y aún así, Beatriz le hizo perder la cabeza y la perdió…
Misteriosamente, porque aún no la encontraron, ni su cuerpo tampoco, estaba con una losa de hormigón en los pies descansando en el fondo del río Guadalquivir…y la cabeza en el particular museo que se estaba preparando en la mansión de la señorita Lucrecia.


El  senador como cada día, años después esperaba en su ventana con los prismáticos dirigido a la comitiva de las cuatros señoras que subían la escalinata de la mansión y tres cámaras de vigilancia grabando cada uno de sus movimientos…Aunque en principio aceptó el chantaje de Lucrecia, su amor propio nunca aceptó que una plebeya muerta de hambre lo hubiera chantajeado de esa forma…

Ángel Reyes Burgos

Capitulo 2.-Su primera victima, Terror


Capitulo 2.-Su primera victima

En el camino de regreso a la cueva, la niña intentó patalear a pesar de sus destrozados tobillos y aplaque sus inicios de protesta con un golpe de la maza sobre su cabeza, los perros me gruñeron en un gesto amenazador y de protesta…pensé que para ser tan sanguinarios esos bastardos, parecían tener un poco de consideración con la niña y pronto descubriría lo errado que estaba…
Al llegar a la cueva, la solté sobre el suelo, su pequeño cuerpo produjo un sonido apagado al golpear contra la tierra y un grito de dolor inundó el lúgubre lugar mientras con gesto de nuevo amenazador los perros me miraban.

No entendía muy bien el porqué de la actitud de esos carniceros, pero pronto me di cuenta cuando el macho, se acercó a l glúteo de la niña y de un certero mordisco le arrancó un trozo de carne…la hembra sobre su mano derecha le arrancaba los dedos y se los tragaba para ponerse inmediatamente a lamer sus heridas….con una macabra sonrisa en mi rostro, entendí el propósito de los perros, no querían matarla inmediatamente, disfrutaban con los gritos horrorizados de la niña que no tuvo aún la suerte de perder el conocimiento…como dos aristas que observan su obra, los animales se sentaron a su lado y la contemplaban con la mezcla de sangre y saliva saliendo de sus asquerosas bocas.

La preciosa niña rubia de ojos increíblemente azules, parecía una muñeca rota con  los parpados totalmente abiertos y el horror reflejado en su rostro, no emitía ningún lamento, su estado era de parálisis total a consecuencia del shock, los perros solo se movían para lamer sus heridas y yo pude disfrutar de ese hermoso espectáculo y esa lección para comerme a mis victimas vivas el tiempo que se las pueda prolongar y aumentar mi placer con el dolor reflejado en sus rostros….

Me acerque al cuerpo, los animales habían entendido que yo había aprendido la lección. me dejaron  disfrutar de dos suculentos bocados de la tierna carne, procurando no seccionar arterias o venas importantes para que no se desangrará… un grito estremecedor de la niña, rompió la concentración de los animales y a mí me dio por reír como si estuviera poseído…los perros enseguida terminaron con el macabro espectáculo al seccionar de un solo mordisco la garganta de la niña y desgarrar todo su cuerpo dejándome grandes trozos de carne a mis pies…

Me habían enseñado  a disfrutar de mis victimas saciando mi apetito y disfrutar de la sensación que me produce el pánico que como un afrodisíaco viaja por mi sangre al contemplar ese horror reflejado en sus caras mientras trozo a trozo sus huesos y su carne desaparecen…ya estaba pensando en la forma de prolongar más sus agonías…

Del cuerpo de la niña solo quedó el cráneo con jirones de piel sanguinolenta pegado…
y sus enormes ojos abiertos que parecían mirarme llenos de incredulidad.  Salimos de la cueva para beber  en un arroyo que había detrás, un disparo de escopeta nos hizo retroceder de nuevo a la cueva,  permanecimos por un buen rato en completo silencio mientras se escuchaban voces a lo lejos…

Ángel Reyes Burgos

Historia 2.-Incongruencias.Relatos

Historia 2.-Incongruencias.
Rafael suspira de amor cada vez que está con su amada Laura, solo llevan seis meses de novios y piensa que es la mujer de su vida, aunque apenas ha cumplido los diecisiete años y ella los dieciséis, sienten que son la pareja perfecta...se conocieron en el instituto y siempre que se cruzaban, se dedicaban una mirada especial, hasta que un día un amigo común los presentó y sus vidas parecían unirse para siempre...

Observándolos juntos mucho tiempo, uno llegaba a sentir empalago de sus ronroneo continuos, sus caricias
y las cursis palabras que se dedicaban continuamente...¿quién es la gatita más linda?...ella, miauuuu... y como si quisiera arañarlo, le pasa los dedos por la cara y le dice...¿quién es el león más guapo y fuerte del Instituto?...Grrrrr, te voy a devorar entera...pero solo se quedó en un frugal beso en la cara...

El beso fue breve, porque al acercarse a besarle, el vio cerca a Lorena, una joven explosiva de hermosos pechos que procuraba siempre resaltar con escotes generosos que hacían babear a sus compañeros y que con frecuencia, los hacía babear un metro más abajo de sus bocas,  cuando indiscriminadamente se iba con unos y otros para aplacarles el nivel de su testosterona y ella seguir sintiéndose la más deseada y puta...

Rafael, le decía cosas hermosas a Laura, mientras por encima de su hombro miraba a Lorena que le sonreía sentada en un banco abriendo y cerrando las rodillas y produciéndole una erección...le dice a su amada... mira como me pones...y llevándole su mano a la entrepierna se la aprieta y ella reacciona dándole un bofetón...el se siente ofendido y le recrimina que es una estrecha.
Amor por favor, no te sientas mal, aún es pronto para eso, el la besa en la boca y con delicadeza le toma la mano y se la pone de nuevo en su entrepierna,. Crees de verdad que es pronto, mira como me pones, sin dejar de mirar el movimiento de las piernas de Lorena...está bien mi amor, esta tarde cuando salgamos del Instituto te voy a demostrar cuanto te amo...

Ella se marchó a una clase de matemáticas y el se quedó sentado en el césped mirando ahora descaradamente a los muslos de Lorena que se habían quedado abiertos sin moverse en una actitud obscena y retadora...se levantó y camino hasta su banco, ella sonriendo le preguntó, ¿ya se fue tu novia?, no es mi novia, solo una amiga, pues quién lo diría con lo acaramelado que estabais... se fijó en el bulto de su pantalón y le dijo...¿te ha puesto ella así o yo?...tu claro, ella es una estrecha...¿tú la amas?., para nada...
Vayámonos de aquí que te voy a bajar los humos y todo lo que tienes subido...

 A las ocho de la tarde en que había quedado con su novia Laura, Rafael aún estaba jugando al escondite con Lorena, aunque más propio es decir, que parte de Rafael seguía escondido dentro del cuerpo de Lorena mientras le decía que estaba loco por ella y la amaba con toda el alma...dejaron de jugar después de las nueve de la noche y cada uno se fue a su casa, aunque la verdad es que solo Rafael se fue a su casa porque Lorena, tenía un nuevo compromiso para jugar con un profesor del Instituto...quería aprobar a toda costa.

Esa noche, Rafael no podía dormir por haber mentido a su novia cuando la llamó por teléfono y le dijo que había tenido que ir al hospital por un asunto urgente de un familiar, ella le dijo que no se preocupara, que al día siguiente sabría cuanto lo amaba entregándose por completo a el...cuando le dijo eso por el móvil, Laura tenia encima a un compañero del Instituto que le había dicho donde se encontraba su novio y que estaba cabalgando con Lorena, se lo demostró llevándola a pocos metros entre unos arbustos donde se encontraban y a pocos metros de ellos se tumbó y abriéndose de piernas le dijo al chico...soy tu gatita, miauuu y tú te me vas a portar como un león...

Rafael y Laura siguieron adelante con su noviazgo y llegaron a casarse cuando ella se quedó embarazada, ella siguió teniendo relaciones sexuales con el chico que la había hecho ronronear de placer por primera vez convirtiéndola en una gata en celo, cuyo furor uterino no podía aplacar su león,  poco a poco, Rafael se convirtió en un gatito mientras Laura rugía de placer con su amante.

Capítulo 2 Pesadillas,-Drama



Capítulo 2

Pesadillas,-

Me he despertado en plena noche con un nudo en la garganta, estaba soñando con mi querido amigo de la infancia, pero su rostro no lo reconocía, su sonrisa había desaparecido y su bronceado y atlético cuerpo era la encarnación de un cuerpo roto, enjuto y desmadejado, sus piernas no les respondía y con los ojos lleno de lágrimas me pedía que lo ayudara. Me hacía preguntas dentro del propio sueños como...¿no puede ser que un niño de seis años esté en esas condiciones que solo vi en los centros de drogodependencias en los adultos...y como podía ser que en el sueño lo viera como un joven apuesto y fuerte cuando era solo un niño...los sueños se entrecruzaban de una forma absurda que me hizo pasar la noche muy inquieto deseando despertar.

Lo primero que hice por la mañana es tomar la tarjeta que me había dado y llamarlo por teléfono, una voz cansada y apenas audible me contestaba desde el otro lado, tardó en reaccionar cuando le dije quien era y le comente mi sueño, siendo ese el motivo que me sintiera inquieto por él y quería saber como se encontraba, No te preocupes Ángel, solo creo que me pasé anoche con el alcohol y me acosté muy tarde, nada que no pueda solucionar una buena ducha y un café.

Pues me quedo mas tranquilo Pedro, llámame para lo que sea que necesites, quizás quieras explicarme con más calma ese asunto que tienes con la joven, aunque no sea cosa mía, si me preocupa, pero sobre todo quiero hablar contigo de ese tema del consumo de cocaína que puede llevarte a un envejecimiento prematuro y acabar con tu vida y tus finanzas...

No puedes decirme eso, apenas la pruebo salvo en contadas ocasiones y tienes que saber que tengo mi cabeza muy bien amueblada y jamas voy a caer en una dependencia tan destructiva como esa, solo en fiestas ocasionalmente la tomo y esa mierda no va a poder conmigo...

Yo no me tranquilicé con lo que me dijo, aún me preocupó más, porque había leído mucho sobre las formas en que la gente se engaña así mismo en estos temas autoconvenciéndose de que puede controlarlo y solo la tomará cuando el quiera y no cuando esa droga u otra cualquiera se lo imponga, ¡yo no soy como los demás¡ se decía así mismo...

Quedé en llamarlo otro día para comer, pero después de varias llamadas infructuosas, desistí de hacerlo y terminé por preocuparme definitivamente por la suerte de Pedro.
Un día, vi su ferrari aparcado en la puerta de una cafetería y entré a buscarlo, no lo vi dentro y le pregunté al camarero por el dueño de ese coche, me señaló a un cliente que yo no conocía y me dirigí a el para preguntarle...me contestó que el coche se lo había comprado a un tal Pedro y por cierto muy barato porque tenía urgencia por obtener dinero para un asunto que tenía pendiente, este sujeto me dice que se llama Raúl y continua diciendo,...me he enterado esta mañana que le debía mucho dinero a unos narcotraficantes y ese sería el motivo de que quisiera venderme el coche, me duele ese tema porque yo fui compañero de el en la facultad de ciencias y era un buen chico y muy crítico con el tema de las drogas...me hace sentir mal que haya caído así.

Intenté mantener mi serenidad delante de ese señor que no conocía de nada y guardar mis tristes emociones que pugnaban por delatar la importancia de esa noticia tan desafortunada, inmediatamente me acordé de la conversación de aquella mañana en que lo llamé preocupado por uno de mis sueños en el que me aseguraba que no me preocupara por eso, el controlaba su vida y nada ni nadie podía controlarlo a él...para mi parecía evidente después de lo que me acababa de enterar, que su vida se estaba precipitando a ese vacío sin fondo que parece no tener fin, pero generalmente si lo tiene cuando un día te paras en seco porque las puertas del abismo se han abierto y tu sigues cayendo y cayendo indefinidamente...

Ángel Reyes Burgos

Capitulo 1.-Hombre o animal...


Capitulo 1.-Hombre o animal

Desde que puedo recordar, vivo en una pequeña cueva solitaria sin contacto con otros humanos en el pirineo Aragonés, mi única compañía son dos mastines de apariencia tan grotesca y desagradable como la mía, que en algún momento hicieron acto de presencia cuando me encontraba enfermo y hambriento…la hembra llevaba una mano humana en la boca que dejó en el suelo junto a mi…

Mi dentadura está muy desarrollada, hasta el punto que mis colmillos se clavan en mi labio inferior que me cuelga por un desgarro que sufrí en un enfrentamiento con lobos y mi cráneo, en parte pelado alrededor de una enorme hendidura producto de una dentella, confiere a mi cabeza una imagen repugnante.
Mi potente dentadura, me permite comer la carne cruda y esa mano iba a ser todo un festín para mi .vacío estómago... la devoré con los huesos que crujían a cada bocado...Era la primera vez que comía carne humana, pero no sería la última…

Aún me sentía débil para levantarme, cuando la hembra me trajo lo que era la parte del muslo de algún niño y como la mano también era pequeña, pensé seria del mismo individuo y que probablemente tuvieran el resto guardado en alguna cueva de los alrededores…con esa última comida me sentí de nuevo fuerte y con ganas de utilizar a mis nuevos y sanguinarios amigos para alimentarme.

Al día siguiente, até con unas cuerdas de cáñamo a las dos bestias que me enseñaban sus enormes mandíbulas mientras lo hacía  y las cerraban con un golpe seco intentando atrapar mi muñeca, un golpe firme en el hocico con una raíz terminada en una maza, terminó con sus intentos mientras un aullido de dolor quebraban sus gargantas…ahora sabían quién mandaba…salimos a inspeccionar las cuevas en dirección a la aldea y los perros se adentraron en una donde me enseñaron sus tesoros…varios cráneos juntos a diferentes huesos que por su tamaño eran de niños, alfombraban el suelo en un ambiente tétrico, un olor nauseabundo acompañaban a unos  restos aún con carne que parecía ser la fuente de mi última comida…

La cueva estaba como a diez kilómetros de la aldea más cercana, en un sitio poco accesible, por lo que no tenía encuentros con seres humanos, la única vez que vi a uno me miró como si viera al mismo diablo…intentó correr asustado y mis ágiles piernas lo alcanzaron al momento y cayó fulminado cuando mi maza le abrió el cráneo en dos, lo metí en unos matorrales para que lo devoraran las alimañas…ese territorio era solo mío, eso sucedió antes de llegar los perros y ahora pensaba…que desperdicio de carne…



Cuando vimos la mal nutrida despensa con solo algún despojos, los perros y yo sabíamos que teníamos que ir de caza, nos encaminamos a la aldea…allí estaba jugando en el río una niña de unos diez años, sola y demasiado lejos de su choza para que escucharan sus gritos, de tres zancadas llegué junto a ella y le tapé la boca, mientras  los perros destrozaba sus tobillos para que no pudiera correr si se soltaba… los cuatro nos zambullimos en el interior del monte para desaparecer...

Historia 1.- Divergencias....

Historia 1.- Divergencias.
Pablo y Susana son un matrimonio que se llevan bien porque nunca discutían, pero hoy…
Suena el despertador y ella le va a dar un beso…el, aparta la cara, no, aún no me lavé los dientes.
Se sientan a desayunar, el toma un periódico con una mano y la tostada con la otra y ella pregunta...
¿Amor, como has dormido?
Sin levantar la vista murmura, ummm,
Chato, me gustaría ir el sábado al cine…
¿Es que no puedo ver la bolsa tranquilo?
Pero si no tenemos acciones ¿que más te da?…
Tu con tal de fastidiarme Susana, no me dejas…Susana ya no dice ni una palabra.
El se pone la chaqueta y abre la puerta, ella se acerca a darle un beso y el la cierra antes de que llegue…

Llega a la oficina sonriente y le da un beso a Penélope, a Josefina y le gasta una broma a un compañero que sonríe…se siente satisfecho de sí mismo por lo simpático que es y lo que lo quieren sus compañeros…

Vuelve en la noche a su casa como si se hubiera tragado un limonero, Susana lo va a besar y se aparta diciendo que viene muy sucio de la calle, se sientan a cenar, toma de nuevo el mismo periódico…
Ella le pregunta… ¿y eso del cine?, El ummm, lo del cine…
Que inoportuna eres, estoy repasando la bolsa, pero Pablo, es el mismo periódico de la mañana, ¿es que ya se actualizan solos?

Mirando a su mujer le vuelve a decir, desde luego tu con tal de fastidiar…

Se acuestan y ella siente la necesidad de que la abrace, el se aparta, déjalo Susana estoy hoy muy cansado, ella se da la vuelta y se le escapa una lagrima…

Un día llega temprano a casa y hay un guapo joven que le enseña una biblioteca en un catalogo, los mira a los dos como si quisiera fulminarlos con la mirada, el joven que solo pretendía ganarse unos euros, se percata de la situación y disculpándose, ya volveré otro día, toma sus catálogos y se marcha.

Al quedarse solos se genera una fuerte discusión…
¿Es que en cuanto me de la vuelta vas a meter un tío en mi casa?
Pero Pablo, solo era un vendedor de libros. Si claro tu qué vas a decir…
Llevas sin tocarme ocho meses y no se me ocurre pensar en otro hombre…
La discusión aumenta de tono y ella ya cansada va a su cuarto, hace las maletas y se va.
Pablo no hizo ningún gesto para detenerla.

Terminan divorciándose y Pablo se casa con su compañera Penélope,
quizás pensando que abreviando su nombre, se quedé en Pene y le sirva para algo…

Una semana como en la luna de miel y una mañana al sonar el despertador, el le va a dar un beso
y  Penélope le dice, no, aún tengo restos de maquillaje…
Se sientan a desayunar y ella se dedica a poner sms y a hablar con las amigas, el intenta tener una conversación, pero continuamente ella se evade diciendo que está muy ocupada hablando… se pone la chaqueta y ella ni se levanta a despedirlo…
En la cena Penélope está demasiado atenta a una telenovela y le pide que la deje en paz.
Se acuestan y él se siente solo, no pretende sexo, solo sentirse querido,
pero ella le dice que tuvo un día agotador y que la deje dormir…

Pablo se da la vuelta triste y de sus escasas neuronas divergentes, pare solo cinco palabras…
Todas las mujeres son iguales... 
Seguramente después de eso, Pablo recordará toda su vida a la mujer que tantas atenciones le prodigaba.

Conociendo a las damas...

Conociendo a las damas...



La dama de blanco era la señora Lucrecia, como el color de fondo blanco del tablero del parchís, reunía a todas sus fichas, no tenia que tirar los dados para moverlas, su liderazgo estaba claro y lo respaldaba un carácter fuerte, físicamente  la más alta de todas, aficionada a la natación y con pinta de haberse tragado a Tarzán de los monos en sus mejores tiempos.

Como a sus cinco amigas, a Lucrecia la abandonó su madre en la casa cuna de Sevilla, la dejó en un torno que había en la pared parecido a un pasa platos, de esa forma la madre se evitaba la vergüenza de explicar que su hija era ilegitima y las monjas tenían un inquilino mas para sacar más subvención a la Diputación de Sevilla…

Allí conoció a sus amiguitas y allí se llevaron todas a los ocho año los primeros palmetazos en las manos por curiosearse unas a otras donde las monjas no permiten la curiosidad por que es pecado mortal, eso les hizo ser más curiosas…de niños ya se sabe, si te lo prohíben los adultos, es porque tiene que ser algo bueno.

La edad límite para estar en la casa cuna era a los nueve años, las trasladaron juntas a un internado de menores y allí se afianzo el liderazgo de Lucrecia cuando en su cumpleaños catorce, la directora le regaló una caja de bombones y el joven jardinero, una cajetilla de tabaco rubio americano, fue una ganga porque solo le costó subirse la falda.
La cosa se complicó cuando el jardinero le ofreció un cartón de tabaco por ir más allá, fueron mucho más allá donde estaba el huerto y en el cobertizo, Lucrecia se clavó por primera vez el  rastrillo en la espalda. Las amigas que la habían seguido, también querían su cartón de tabaco, pero el jardinero no tenia para todas y tendrían que esperar…

La señorita Lucrecia, tuvo la mala suerte de enamorase del jardinero y lloraba sola y desconsolada cada vez que una de sus amigas aparecía con un cartón de tabaco.
Juraba continuamente que se vengaría de los hombres y ese veneno suyo se lo transmitió cada día a sus amigas que hicieron causa común con ella.

A los dieciséis años, recibió el regalo que todas esperaban, una casa de acogida, la puerta trasera para evitar las costosas adopciones y sus trámites legales.
Las acogió un matrimonio sin hijos con una gran fortuna, el senador y ella marquesa.
Como senador descendiente de una larga lista de políticos en la familia, sus propiedades se repartían por medio mundo, aprendió de su padre y de su abuelo el arte de acumular riquezas sin levantar sospechas, todos sabemos que es más fácil eso, que despistar de la vitrina de un supermercado un pollo y además por mucha hambre que tengas, está mal visto…

Para un señor de 51 años con una señora arisca y poco agraciada, la señorita en esa casa era una bomba de relojería, máxime cuando ella sabía muy bien que quería.
Los continuos cruces de sus piernas cuando se sentaba frente a él, la forma de agacharse a por los objetos de frente y abriendo las rodillas, la puerta del baño abierta casualmente cuando se duchaba, pero siempre cuando no estaba su mujer, aunque nunca se insinúo, todo parecía un juego inocente…

A Don Tomas le crecía cada vez más la lengua y sentía que se iba a ahogar en su propia saliva, el calor en su cara se hacía insoportable y el dolor de sus partes nobles de su noble persona, a veces tenía que aplacarlos con sesiones de auto-complacencia…
En una ocasión que Don Tomas creía tenerlo muy claro, ella le paró los pies…pero Don Tomas, no se equivoque conmigo, soy una chica decente…terminó de volverlo loco.

A su mujer cada vez la mandaba mas fines de semana a un balneario donde se tomaba baños de barro, a ella le decía que era bueno para la piel, por dentro pensaba que donde mejor están los cerdos es en el barro…

La agonía de Don Tomas crecía día a día. Antes de cumplir Lucrecia sus dieciocho años, el senador estaba en plena campaña por la presidencia, no había mejor momento para poner en práctica el plan trazado por la señorita. Se dejó de rodeos, se dejó de tonterías y también se dejó coger. Solo una vez por que el senador no le gustaba y no dejaba de pensar en su jardinero.

Previamente, ella había colocado una cámara de vídeo en su habitación y las vergüenzas de Don Tomas quedaron inmortalizadas. También las de la señorita Lucrecia, pero a mi entender, ella perdió la vergüenza cuando se levanto la falda por un paquete de tabaco.

La jugada le salió perfecta cuando un Don Tomas terriblemente abatido y asustado, contemplaba ese vídeo que amenazaba hacer público si no cumplían sus exigencias. Aún era menor cuando se grabó.
Según Lucrecia no era mucho para su enorme fortuna, 6.000 euros al mes de forma vitalicia y la mansión de los padres fallecidos que estaba al lado de la suya.
El senador aceptó el trato por que ella había depositado copias del vídeo en las cajas de seguridad de tres bancos y había dado orden al respecto de hacerlo público si a ella le pasaba algo. Pero de ninguna forma le pondría la mansión de los padres a su nombre, solo la dejaría vivir hasta su muerte, a cambio él correría con todos los gastos de la casa.
Doña Lucrecia se dio la gran vida y jamás permitió que la visitara su vecino…

A este senador es al que cada día la señora Rosario conocedora del chantaje que le hizo Lucrecia, le manda un afectuoso saludo con el dedo corazón levantado mientras sonríe, el hombre permanece impertérrito y sigue con sus prismático observando la ceremonia de subida por las escaleras hacia la mansión.

Doña Lucrecia nunca se casó, tenía suficiente con los postres del té de las cinco…

En plena forma, capitulo primero.



Capítulo 1

En plena forma.-

Me he encontrado con Pedro en el club de campo, desde hacía mucho tiempo no lo veía, se nota atlético y en muy buena forma, con ese bronceado especial que nos da un tono saludable por los juegos al sol, su favorito coincide con el mío, el tenis, o quizás solo sea por el snobismo que a los nuevos ricos nos produce ese orgasmo mental el sentirnos en la cúspide  de la sociedad inscritos en los mejores club...
El está en la pista de al lado y después de un breve pero afectuoso saludo, quedamos para tomar unas copas una vez terminemos nuestros juegos.

La conversación comienza como todas en las que tienes en común esos recuerdos de niños que tanto une y que tan buena excusa es siempre para romper el hielo que la distancia en el tiempo impone en las relaciones, aunque nuestro afecto se había conservado por los años y la alegría de estar juntos de nuevo, no era esa ficticia que tantas veces se producen en la calle con personas que apenas recuerda y te ves forzado a ser amable con sonrisas permanentes que te hacen parecer idiota...ademas ya paso de los cuarenta y me preocupa tanto las arrugas como a las mujeres, solo una persona que se preocupa de esas cosas, puede observar en otras el cuidado al que somete su piel para mantenerse joven y Pedro lo había conseguido por el momento...

Tenía una buena empresa de importaciones, me enseñó fotografías de su mujer y sus niños y esa que con tanto orgullo estaba como fondo de su móvil, un hermoso ferrari rojo deportivo que hasta a mi me dio envidia, se notaba que su posición económica superaba con crece a la mía, no sentí envidia, solo una gran satisfacción por el por qué a mi entender se lo merecía.

Pasamos una tarde maravillosa, después de comer nos fuimos a un pub que el conocía con actuaciones en directo de buenos humorista que nos hicieron reír con ganas...en un momento determinado, entró una morena de esas que decimos de infarto y se dirigió a nuestra mesa con sus movimientos insinuantes y mirando para todos lados como diciendo, aquí estoy yo...se paró en nuestra mesa y besando en la boca a Pedro se sienta con displicencia y satisfecha de si misma.
En principio pensé que era su mujer pues yo estuve trabajando muchos años en París y no había tenido la oportunidad de estar en su boda ni en su casa y no la conocía, pero la foto que me enseñó de su mujer un momento antes, no era la de una mujer que se pareciera en nada a esta que ha entrado.
No sabia que pensar por que las mujeres cambian mucho dependiendo como se arreglen.

Enseguida me sacó de dudas cuando mirándola me dice, ¿Te gusta lo que ves?...conseguí reprimir un ¡es preciosa tu mujer¡, cuando rápidamente el me dijo, es mi novia...tampoco le sonreí por eso, pues en el fondo me entristece esa relación al margen de su mujer, aunque sin saber todos los detalles no se me hubiera ocurrido juzgarlo interna o externamente.

Se levantaron juntos para ir al servicio, estaba una puerta al lado de la otra pero los dos se metieron en el de mujeres, al cabo de un rato y de forma visible al salir, se limpiaban las narices y en sus dedos quedaba un pequeño rastro de un polvo blanco evidenciando la adicción que los dos tenían...

Me despedí de el con mucha tristeza y preocupación, he visto a lo largo de mi vida muchas personas en buena forma tanto física como mentalmente, arruinar sus cuerpos y sus finanzas por ese veneno que poco a poco se mete en tu sangre y te llevan por un camino de destrucción hacia el abismo...

Venganza salvaje, novela de terror, prólogo.

Licencia Creative Commons

Por la crudeza de esta novela, no se recomienda la lectura a personas especialmente sensibles y resulta totalmente prohibido para menores de edad…

Capítulo 1.-Hombre o animal
Capítulo 2.-Su primera victima
Capítulo 3.-Matanza múltiple
Capítulo 4.-La matanza de los jabatos
Capítulo 5.-Cazador cazado
Capítulo 6.-Cruel venganza
Capítulo 7.-Doble asesinato
Capítulo 8.-Un cuadro macabro
Capítulo 9.-Parto grotesco
Capítulo 10.-Cuerpo profanado
Capítulo 11.-Conociendo el origen
Capítulo 12.-Asesinato de su hijo, Eva y Javier
Capítulo 13.-Empieza la cacería
Capítulo 14.-Hacia la cueva del engendro
Capítulo 15.-La cueva de los huesos
Capítulo 16.-Carnicería en la aldea
Capítulo 17.-La sandalia del pescador
Capítulo 18.-Con el rabo entre las piernas
Capítulo 19.-El cementerio crece
Capítulo 20.-De vuelta a la aldea
Capítulo 21.-La jauría sometida
Capítulo 22.- Venganza consumada
EPILOGO:

Venganza salvaje, Novela de terror de Ángel Reyes Burgos

Prólogo...

Albert Einstein dijo… Solo hay dos cosas infinitas, el universo y la estupidez humana y de la primera no estoy muy seguro…lo que no tendrán ninguna duda al terminar de leer esta novela es de su infinita perversión…

Lo que aquí relato, son las experiencias de un psicópata que estuve entrevistando unos días… Estando en Aragón, me hablaron de unos terrible sucesos acaecidos en una remota aldea del pirineo, como periodista y psicólogo, sentí curiosidad por conocer los acontecimientos de primera mano, casi pierdo la vida en el intento, este hombre no hablaba con nadie y los que lo intentaron, nunca se les volvió a ver. Quizás me salvo la vida el hecho de que llevaba una foto de su madre que le enseñe cuando me iba a atacar.
Pasé tres semanas de un crudo invierno en su cueva tomando notas.

Me costó mucho escribir lo que me contaba porque su vocabulario era muy escaso y su pronunciación casi inteligible, pero después del trabajo que me costó el permitirme que le entrevistara, no dejaría la labor sin terminar…
En más de una ocasión, estuve por abandonar, las atrocidades que ese salvaje contaba, me ponían los vellos de punta, no sabía si tendría estomago para llegar al final de esta odisea...

No sabía su nombre, ni su edad ni cómo llegó hasta la cueva, tampoco recordaba haber tenido trato con otros humanos, lo primero que recuerda y me cuenta es, que un día se encontraba enfermo. Dos mastines negros con multitud de cicatrices, aparecieron por la mañana en su cueva llevando una mano y parte del brazo de un niño, había visto en una ocasión uno bañándose en el río y le recordaba a eso…la perra lo deposito junto a el en el suelo como si fuera un regalo, su hambre era acuciante y lo devoró en unos momentos, nunca había comido carne humana, le gustó y supo que iba a seguir comiéndola.
Su exagerada dentadura, le permitía rasgar la carne y triturar los huesos.
Su cabeza en parte pelada y una gran cicatriz sobre su sien derecha y con una hendidura en el cráneo, le conferían un aspecto tétrico y terrible, no me sentía cómodo mirándole a la cara, me inspiraba temor.

Conforme pasaban los días, mi mente se iba abriendo y confieso que en algún momento me identificaba con él, llegando a sonreír con sus salvajadas y sintiendo cierto placer en sus perverso comentarios, mi lucidez, estaba dando un vuelco peligroso...procuré aclarar mis ideas y seguir con el objetivo que me trajo hasta aquí, sin saber lo que el destino me había deparado al pasar con el tiempo, de ser medico a paciente…

Es probable que mi incipiente locura, este debida a escribir esta novela en primera persona, metiéndome en la piel de este psicópata y relatarla como si se tratará de mis propias vivencias, seguramente en algún momento tendré que desligarme de este ser infernal, si no quiero que su personalidad psicótica se transfiera a la mía convirtiéndome en un autentico asesino…